Cultivos energéticos, una manera de asegurar el suministro en plantas de biomasa
Los cultivos energéticos son una forma económica y segura de producir biomasa de bajo costo siendo una manera de asegurar el suministro en plantas de biomasa. Asi mismo, generan beneficios ambientales y permiten utilizar tierras marginales.
La biomasa sólida se encuentra en residuos forestales, agrarios, agro industriales (como los ingenios azucareros) o forestales (como los aserraderos). Sin embargo podemos plantar biomasa y reforestar tierras marginales con un gran beneficio ambiental. La biomasa para energía se obtiene mayoritariamente de las industrias de primera y segunda transformación de los productos agrícolas y forestales. También de los residuos de explotaciones ganaderas, de los restos de aprovechamientos forestales, de los residuos de los cultivos asi como también de cultivos implantados y explotados con el único objetivo de la obtención de biomasa. A estos últimos se les denomina cultivos energéticos, pero no dejan de ser cultivos forestales o agrícolas. La ventaja fundamental de los cultivos es la predictibilidad de su disposición y la concentración espacial de la biomasa, asegurando el suministro.
La predictibilidad de la disposición de la materia prima es fundamental para cualquier industria, y la de la energía no es distinta.
Cuales son los típicos cultivos energéticos que se consideran:
La concentración del recurso permite una gestión mecanizada, poco intensiva en mano de obra, y relativamente barata.
Los cultivos energéticos se pueden clasificar de muchas formas, por el tipo de suelo donde crecen, por el tipo de producto que se cosecha, etc. Según su aprovechamiento final, los cultivos se pueden clasificar en:
- Cultivos alcoholígenos para la producción de bioetanol a partir de procesos de fermentación de azúcares.
- Cultivos oleaginosos para la producción de aceites transformables en biodiésel
- Cultivos lignocelulósicos, para la generación de biomasa sólida susceptible de su uso para distintas aplicaciones:
- Térmicas, como climatización de edificios, agua caliente sanitaria, y aplicaciones industriales (preparación de cualquier fluido de proceso).
- Fabricación de combustibles más elaborados, con un valor añadido a la biomasa bruta, como astillas o pellets.
- Cogeneración generalmente asociada a una actividad industrial, o generación eléctrica simple.
- Obtención de biocarburantes de segunda generación.
Dada la experiencia en todo el mundo, los biocarburantes han sido extremadamente criticados por poseer diversos efectos negativos al reemplazar gasolina, ya que en algunos casos utilizan materias primas alimentarias como el maíz. Es por ello que en muchos países y sobretodo en aquellos con tierras marginales como se ve en España, lo que predomina es cultivar biomasa para calor y electricidad.
Nuestro grupo, es un grupo internacional de expertos europeos y latino americanos, que nos dedicamos a promover el tercer grupo de cultivos fundamentalmente por motivos ambientales y por que nuestra visión y valores, promueven mayormente cultivos de tipo perennes en zonas mu marginales no aptas o extremadamente poco competitivas para la agricultura tradicional.
Entre nuestras alternativas promovemos agroforestación y reforestación para producir energías renovables.
Proyecto de produccion de biomasa en Mexico. Scribe.